El Acuerdo de París firmado en 2015 detalló la importancia de trabajar juntos a nivel global para reducir las emisiones de efecto invernadero para 2030, llegando a cero emisiones netas para 2050. La ciencia ha sido clara, destacando en los últimos años la urgencia con la que todos debemos trabajar juntos para lograr este objetivo si queremos reducir los efectos negativos del cambio climático. Aunque el tema siempre ha tenido un gran peso en las cuestiones medioambientales, acontecimientos recientes como la COP27, la COVID y algunas tensiones geopolíticas han cambiado la manera de ver la colaboración mundial, enfatizando poco a poco el papel de la S y G en ESG.

No cabe duda de que la gobernanza ha adoptado una postura más firme al respecto, el acuerdo de París ha sido el catalizador común para que otros países se suban al carro, pero más concretamente, el sector inmobiliario ha jugado un papel importante en lo que respecta a la “G”. Con el aumento de las normativas que instan a los actores principales a considerar la forma en que consumen energía, los inversores se enfrentan ahora a retos si deciden no cumplir con los informes de transparencia.

Hoy en día, el valor de los activos depende en gran medida de la correcta presentación de informes y las bajas puntuaciones de ESG. Algunas de estas normativas son el SFRD, CSRD, Decreto Terciario en Francia, y la taxonomía de la UE (por nombrar algunas). Desde la COP27 en Egipto y la segunda parte de la COP15 del CBD sobre biodiversidad en Canadá, estamos viendo un cambio de prioridades, teniendo más en cuenta las cuestiones sociales que pueden obstaculizar el éxito de los objetivos medioambientales descritos inicialmente. Al destacar adecuadamente las cuestiones sociales subyacentes, hay esperanza de que la mitigación del cambio climático sea mucho más realista, siendo una de las soluciones la adopción de un marco DEI (Diversidad, Equidad, Inclusividad).

DEI

Los fenómenos meteorológicos extremos y las catástrofes naturales de todo tipo se han convertido en una realidad cotidiana. Para conseguir reducir las temperaturas en 2ºC, es necesario trabajar juntos en acciones inmediatas y aumentar las expectativas. Esto incluye depender específicamente en quienes están en posición de mitigar y hacerlo predicando con el ejemplo. Uno de los principales avances ha sido encontrar la financiación necesaria para satisfacer las necesidades de los países en desarrollo y mejorar la resiliencia de las comunidades más vulnerables. La conversación aquí es adoptar un marco DEI (diversidad, equidad e inclusión) en todas las industrias, en un esfuerzo por mitigar el cambio climático.

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¿Qué significa exactamente?

(Género) Diversidad

Se ha demostrado que los impactos negativos del cambio climático están correlacionados con las tensiones geopolíticas existentes, lo que afecta enormemente a las mujeres y niñas en países más vulnerables que carecen de recursos de apoyo.  Por ejemplo, algunas aldeas rurales en Yemen, Irak, y Siria han sufrido intensas sequías en los últimos años debido a la crisis climática. En respuesta, las mujeres y niñas encargadas de transportar agua en comunidades que no tienen acceso a agua potable cerca, hacen que algunas arriesguen potencialmente sus vidas viajando más lejos de casa para encontrar agua. Los daños incluyen la pérdida de educación o viajar hasta las ciudades durante tensiones políticas peligrosas que pueden dar lugar a mayores índices de agresiones violentas o sexuales.

Marketa Simkova, Partner y Head of People and Change en KPGM, dice que “el 50% de la mejora en la seguridad alimentaria en países en desarrollo se debe a la promoción de programas de empoderamiento de la mujer en la última década. Esto indica que las mujeres pueden ser la fuerza del cambio”. Considerando cómo afecta el cambio climático a los distintos géneros (especialmente en países particularmente vulnerables), aumenta el éxito de las estrategias ESG porque incluye la profundidad que proporciona un marco de DEI.

Según Jessica Robinson, MENA Sustainable Finance Leader en EY-Parthenonin, “Integrar el género en la toma de decisiones de inversión mejora las oportunidades económicas y contribuye a garantizar el bienestar social de las mujeres y las niñas”. Con soluciones que tengan en cuenta las diferencias de género, podemos asegurar acercarnos a una solución que pueda ser mantenida por todos a nivel global.

Antonio Marquez es el socio principal y gerente de Comunidad Partners, una firma estadounidense formada al 100% por mujeres y minorías, y es solo un ejemplo de líder que entiende que la diversidad cultural es clave. Anna Dunkley, operations manager de Mayfair Capital, la sucursal británica de Swiss Life Asset Managers, afirma que las empresas deben intensificar su juego para incluir la diversidad no solo por motivos de regulación, sino por motivos de cambio. “Históricamente, las mujeres han sido las que han realizado las tareas administrativas. Se trata de garantizar que haya una clara progresión profesional y que los supervisores directos estén formados. El papel del manager ha cambiado dramáticamente, sobre todo desde la COVID. Atrás quedaron días de delegación. Ahora se les percibe como mentores”. 

Diversidad en el sector inmobiliario

La diversidad juega un papel importante en el futuro actual. A medida que aumenta la globalización, ignorar la diversidad de la comunidad y las distintas necesidades supondría una enorme desventaja para cualquier empresa, así como en el sector inmobiliario. Al mirar más de cerca el papel que desempeña, podemos descifrar la importancia de considerar la diversidad en el aspecto social de cualquier estrategia ESG.

Mike Vein, executive vice president of people en eXp World Holdings, ha implementado cambios en la empresa para aumentar la formación no sesgada. Dice que “la diversidad e inclusión generan realmente una gran diferencia de ideas. Nos ayuda a expandir nuestros horizontes”. Un estudio de Cloverpop, “Analizó alrededor de 600 decisiones empresariales tomadas por 200 equipos, en toda una serie de empresas. Los investigadores descubrieron que cuando equipos diversos (de tres o más personas) tomaban una decisión empresarial, superaban a los tomadores de decisiones individuales hasta en un 87% de las ocasiones. También se demostró que los equipos diversos toman decisiones más rápido que los trabajadores individuales, y se beneficiaban de una mejora del 60% en la toma de decisiones”.  Este resultado se hace eco de la afirmación de Vein que demuestra que tener en cuenta la importancia de diversificar puede suponer un beneficio tanto financiero como social – todos ganamos.

Históricamente, el sector inmobiliario ha sido siempre un indicador de éxito, riqueza y expansión en todo el mundo. Trabajar con diferentes comunidades y colaborar con diversas personas permite que las decisiones reflejen  el punto al que ha llegado el sector inmobiliario hoy en día. Los particulares ya no invierten sólo en propiedades locales. A medida que los agentes inmobiliarios empiecen a buscar maneras de expandir sus negocios a otros horizontes, será aún más importante considerar la diversificación de los equipos.

Equidad

La diversidad y la inclusión son lentes importantes con las que mirar a la hora de abordar soluciones reales y válidas para la reducción de las emisiones GEI. Para garantizar que se alcance el objetivo global, debemos trabajar todos juntos, es decir, todos debemos equiparnos o ayudar a los necesitados a obtener los recursos necesarios para hacer de esto un esfuerzo colectivo. Por eso la equidad social es igual de importante que la diversidad y la inclusión. El fondo de pérdidas y daños para los países vulnerables creado en colaboración con la UNFCC demostró las intenciones detrás de las iniciativas adoptadas en la conferencia COP27. Al reconocer el papel fundamental que desempeñan los países en desarrollo para mitigar con éxito el cambio climático,  se pueden tomar las medidas adecuadas para garantizar su participación en el futuro. El fondo es el primer paso hacia un método de adaptación más inclusivo. El Presidente egipcio, Abdel Fatah El-Sisi declaró que cree que “la COP27 es una oportunidad para mostrar unidad contra una amenaza existencial que solo podemos superar mediante una acción concertada y una efectiva implementación”. Por lo tanto, es pertinente que los legisladores consideren un apoyo financiero adecuado para que los países en desarrollo alcancen mejor los objetivos establecidos por el Acuerdo de París, especialmente en África, LDCs y SIDS.

Los próximos pasos son priorizar la equidad social existente en las siguientes acciones: (1) encontrar métodos de adaptación proactivos y relevantes que tengan en cuenta en qué punto del proceso se encuentran los países en desarrollo, y (2) considerar los efectos de los fenómenos climáticos actuales en determinadas comunidades vulnerables. Los acuerdos alcanzados en los esfuerzos por incorporar el marco DEI a las estrategias ESG nos recuerdan a todos que las personas son el epicentro de los planes de acción medioambiental, y que las soluciones deben incluir las diversas necesidades de las comunidades e individuos. El concepto sacado a la luz en la COP27 de “transiciones justas” consideraba que son necesarios profundos cambios sociales y de gobernanza para ayudar a los países económicamente más vulnerables a cambiar de una dependencia de los combustibles fósiles a medios más naturales. El texto consiguiente, aprobado en la COP27 de 2022, insta a los países a considerar todos los aspectos ESG, incluidas las estrategias sociales y socioeconómicas, a medida que nos enfrentamos a la responsabilidad de mitigar el cambio climático.

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Equidad en el sector inmobiliario

La evolución de la normativa para abarcar más aspectos sociales, medioambientales y de gobernanza refleja las creencias de la sociedad actual. Cada vez más personas buscan trabajos que se ajusten a sus creencias en cuanto a justicia social. La justicia social corporativa se refiere a la responsabilidad de las compañías a priorizar la mejora de los miembros perjudicados o desfavorecidos de la sociedad. Esto significa tomar decisiones financieras que permitan a las personas de toda condición participar de forma equitativa y justa en las actividades empresariales. Es posible que la relación entre el compromiso de los empleados sea mucho más relativa a la responsabilidad social de lo que los líderes empresariales son capaces de ver en la superficie.

Hay un gran espacio reservado para que los agentes inmobiliarios inviertan en medidas adecuadas de equidad social que sean beneficiosas para todas las partes. Por ejemplo, el Comité Building Healthy Places de ULI – LA ha argumentado por qué es importante para el sector inmobiliario adoptar medidas de equidad social. Su principal argumento es que liderar con estándares de desigualdad ha demostrado disminuir el éxito mientras que invertir en medidas de igualdad ha impactado positivamente en la industria de múltiples maneras. Uno de los conceptos más importantes que sugieren tener en cuenta es la creación de edificios sanos para una comunidad más sana. Está demostrado que abordar la salud de los ocupantes como estrategia en la inversión inmobiliaria puede mejorar el valor de los activos reduciendo los costes operativos, aumentando la productividad de los empleados, obteniendo alquileres superiores y aumentando el valor de los inquilinos.

La industria inmobiliaria tiene la responsabilidad de considerar su principal fuerza motriz. Las instituciones financieras y los promotores inmobiliarios deberían reconsiderar sus obsoletos enfoques de la investigación de mercado, la gestión de riesgos y el modelamiento financiero que pueden estar afectando a la desigualdad. La evidencia está ahí para demostrar que una inversión adecuada en equidad social beneficia a múltiples facetas importantes que tienen un impacto positivo en los activos de un actor, así como la retención de inquilinos o el aumento del valor de la cartera. La equidad social puede que siga siendo un tema nuevo para la mayoría de las industrias pero invertir en equidad social dentro de las comunidades requiere de una adecuada coordinación entre los actores, los equipos de desarrollo, el gobierno y los miembros de la comunidad – una inversión que merece la pena para obtener un rendimiento mayor y más holístico.

Inclusión

La COP27 en Egipto fue extremadamente importante para cambiar el paradigma de las estrategias diseñadas para frenar el cambio climático, pasando de un enfoque puramente medioambiental a otro basado en los derechos humanos – en concreto, puso de relevancia los medios necesarios para que los países en desarrollo intenten contribuir a los esfuerzos mundiales. El hecho de celebrarse en África simbolizó específicamente las dificultades a las que se enfrentan los países del tercer mundo tanto con los riesgos climáticos directamente, como la falta de recursos para participar en una contribución significativa al objetivo medioambiental. La declaración realizada por António Guterres, el Secretario General, en la clausura de la COP17 de Sharm el-Sheikh resume la intención general de la reunión de la COP27, y la importancia específica del tema de la “justicia” como un acto de colaboración: “Desde el principio, esta conferencia ha estado impulsada por dos temas primordiales: justicia y ambición. Justicia para aquellos que están en primera línea y que hicieron tan poco para provocar la crisis – incluyendo las víctimas de las recientes inundaciones en Pakistán que han inundado un tercio del país”.

El reciente terremoto en Turquía y Siria es sólo un ejemplo que pone de relieve la importancia de apoyar a los países vulnerables frente a los problemas causados por el medio ambiente – Siria ocupa el puesto 176 de 190 en la escala BTI (Índice Bertelsmann de Transformación que mide el desarrollo de los países en todo el mundo). Por ello, con la materialización de la necesaria contribución de 100.000 millones de dólares anuales en financiación climática para los países en desarrollo, el camino hacia las adecuadas adaptaciones de los objetivos fijados puede ser inclusivo para los países en desarrollo para tener más posibilidades de llegar al objetivo global. Y concluye, “Por último, la justicia y la ambición requieren la voz esencial de la sociedad civil. La fuente de energía más vital del mundo es el poder de la gente. Por eso es tan importante entender la dimensión de los derechos humanos de la acción climática”. 

La segunda parte de la Conferencia de las naciones Unidas sobre Biodiversidad (Decimoquinta reunioçon de la Conferencia de las Partes (COP-15) del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB), verá la adopción del nuevo marco con una hoja de ruta global para la conservación, protección y restauración de la biodiversidad y los ecosistemas. La reunión reconoce la urgencia de una política mundial necesaria para estabilizar las pérdidas de biodiversidad para una mejor recuperación de los ecosistemas naturales. Esto da la oportunidad a las comunidades de trabajar juntas con la esperanza de construir un futuro en armonía con la naturaleza para 2050.

Los gobiernos, el sector privado y la sociedad necesitan trabajar juntos para encontrar soluciones respetuosas con el clima para interactuar con el planeta, con un énfasis especial en enmendar la relación con las comunidades ecológicas y las naciones en desarrollo para avanzar de la forma más sana posible. Inclusión significa considerar las múltiples facetas que pueden verse afectadas por cada acción comercial en el futuro. Dar una oportunidad a cada miembro de la Tierra – incluida la propia naturaleza – significa tener cuidado de que nuestras acciones no perjudiquen otras culturas, así como crear vías realistas para que los más vulnerables puedan seguir contribuyendo. Por este motivo, el sector inmobiliario se encuentra entre las industrias que se enfrentan a la tarea de actuar de forma responsable, no sólo liderando la transparencia, sino también teniendo en cuenta todos los aspectos ESG, incluyendo la adopción del marco DEI cuando se trata de la “S”.

Inclusión en el sector inmobiliario

El sector inmobiliario es un negocio que surge de las relaciones, las personas y las conexiones. Al invertir el tiempo, los recursos y la educación necesarios en las personas, garantizando la concienciación y la inclusión, las empresas pueden liberar un potencial más profundo. Según un estudio realizado por Deloitte en 2017, “Las organizaciones con culturas inclusivas tienen el doble de probabilidades de cumplir o superar los objetivos financieros y el triple de probabilidades de tener un alto rendimiento. Y las compañías tienen seis veces más probabilidades de ser innovadores y ágiles y ocho veces más probabilidad de lograr mejores resultados empresariales”. Adoptando esta mentalidad inclusiva, las empresas pueden aumentar la creatividad y la innovación dentro de un equipo procedente de múltiples entornos.

La inclusividad puede beneficiar el rendimiento directa o indirectamente. Los efectos indirectos de trabajar en el sector inmobiliario desde una perspectiva inclusiva podrían incluir un aumento del valor de los activos y el rendimiento mediante la mejora de la transparencia, la mejora de la imagen corporativa y la retención en beneficio del talento.

La creación de una empresa, esté o no relacionada con el sector inmobiliario, debe basarse, ahora más que nunca, en principios inclusivos que apoyen a todos los miembros del equipo, ofreciendo las mismas oportunidades para esforzarse y retribuir. Al elaborar estrategias basadas en las adecuadas medidas de inclusión, cada miembro del equipo puede alcanzar su potencial, sentirse realizado en su trabajo y usar sus diversas ideas y habilidades para obtener resultados con una mayor tasa de éxito – como se ha mostrado en el estudio de Deloitte.

¿Qué sigue?

Hay buenas noticias – aunque todavía queda mucho camino por recorrer para el sector inmobiliario, cada vez se están poniendo más recursos para apoyar el camino a seguir. Algunas estadísticas de DEI muestran que el 92% de las empresas inmobiliarias comerciales tenían programas de DEI en marcha que hacían del tema de conversación una prioridad. Poner en práctica estas estrategias puede ser un poco más difícil. Los expertos de la industria afirman que hay una gran diferencia entre intención y éxito – por ejemplo;

• En el Reino Unido, la encuesta Real Estate Balance 2020 reveló que entre 2016 y 2020, las mujeres representaban aproximadamente el 40% de la fuerza de trabajo en la industria inmobiliaria para el nivel de entrada de graduados a mandos intermedios, pero el nçumero para puestos de alto nivel disminuyó drásticamente. 
• En Europa, el 43% de las empresas inmobiliarias comerciales contaba con profesionales dedicados exclusivamente a la DEI.
• En Asia-Pacífico, el 33% de las empresas inmobiliarias comerciales contaba con profesionales dedicados a la DEI.
• En Norteamérica, el 21% de las empresas contaban con profesionales dedicados a la DEI, mientras que el 67% de las empresas tenían comités formales de DEI responsables del desarrollo, implementación y revisión de las estrategias e iniciativas de DEI.
• Tanto en Asia-Pacífico como en Europa, alrededor del 44% de las empresas utilizaban comités de DEI.

Aunque cada vez se toman más medidas para incorporar estrategias de DEI, la intención no es lo mismo que el progreso.

Nada de esto es fácil, como Forbes le dirá que puede aumentar el compromiso de los empleados a través de ESG, si hace que su estrategia sea inclusiva, invierte en iniciativas alineadas con los puntos fuertes de la organización y crea embajadores que apoyen sus objetivos de sostenibilidad. A medida que el sector inmobiliario avanza hacia un entorno más inclusivo, es importante recordar que la implementación de la DEI requiere la alineación de todos los frentes: managers, stakeholders, empleados y gobernanza. Mantenerse transparente y crear una declaración de visión que incluya el progreso en DEI son algunas de las maneras en que una organización puede alcanzar sus objetivos. He aquí algunos temas que podrían ayudar a los agentes inmobiliarios a introducir el marco DEI: