Digitalización del propietario: ¿pero de qué estamos hablando?

Berta Icart
Date06 agosto 2021

Desde hace algunos años, el sector inmobiliario ha iniciado su digitalización. Pero ¿qué entendemos concretamente por “inmobiliario digital”? y ¿cómo digitalizar los servicios de gestión técnica inmobiliaria? Situación actual.

Inmobiliario digital: información sobre los usos actuales

La digitalización en el sector inmobiliario se resume hoy en dos tipos de usos principales: la maqueta digital o BIM (Building Infomation Modeling) para modelar la edificación y softwares verticales tipo GTC/GTB o incluso GMAO para pedir la edificación a distancia y automáticamente.

EL BIM o el modelado de la información para la edificación

Consiste en modelar la información para la edificación en una maqueta digital en 3D, el BIM se utiliza principalmente en el diseño de edificios nuevos y en las reformas grandes. Esta tecnología cada vez se explota más por parte de los despachos de arquitectura que pueden así visualizar la estructura del edificio y sus componentes físicos y funcionales (vías de acceso, ventajas técnicas de distribución, etc.).

Es una herramienta muy interesante para evitar los defectos en la fase de construcción/reforma y para garantizar la gestión inmobiliaria o el mantenimiento de los edificios. Sin embargo, su uso está lejos de ser generalizado, principalmente porque las tecnologías utilizadas son muy caras. Por último, el BIM es una herramienta estática. Elabora la lista de las características presentes en un edificio durante su construcción o reforma pero no evoluciona con el paso del tiempo. La maqueta se queda rápidamente obsoleta durante la fase de explotación del edificio.

Softwares verticales vinculados a internet de las cosas (IoT)

Cuando mencionamos la digitalización del sector inmobiliario, estamos pensando también en el número de programas que permiten a día de hoy garantizar la gestión técnica (GTC/GTB) y el mantenimiento de las edificaciones (GMAO). Estas herramientas informáticas están estrechamente ligadas con el internet de las cosas (IoT) cuyos sensores inteligentes aportan numerosa información sobre los equipos conectados. Problema: estos programas funcionan en circuito cerrado y la cantidad de datos recabados pocas veces está correlacionada con otro tipo de información. Resulta, por tanto, imposible tener una visión global en materia de gestión inmobiliaria.

Otras posibilidades para la digitalización en el sector inmobiliario

Para materializar la transición a lo digital, es necesario que todos los datos disponibles sean de fácil acceso y que se puedan conectar entre ellos, incluso si tienen formatos originales distintos. 

Pongamos un ejemplo concreto: ¿Cómo podemos saber si mi edificio consume demasiada energía? El consumo de energía sólo no es indicador de nada. Para conseguir un resultado es necesario contextualizar la información. Más concretamente, esto significa que hay que cruzar dicha información con los datos relativos al edificio (superficie, ubicación, año de construcción) pero también con la actividad de dicho edificio (porcentaje de ocupación, horarios de apertura, equipos presentes…). Sólo cruzando la información de todos estos parámetros podremos estar en situación de hacer un análisis real del consumo del edificio y de determinar si dicho consumo es normal o no. 

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Para mejorar la gestión de los edificios y utilizar todo el potencial de la digitalización en el sector inmobiliario, es esencial empezar por liberalizar y conectar las distintas fuentes de información con vistas a poder explotarlas de forma exhaustiva. Más allá del BIM y de los softwares verticales, ¡pongamos un poco de sentido común en la digitalización de la gestión inmobiliaria!